Los sueños se cumplen con jóvenes en las TIC: historia de Heidy Orozco
Heidy Fernanda Orozco Lazo (25 años) es madre de dos hijos y todos los días se esfuerza sacarlos adelante para que no crezcan en las mismas condiciones y carencia que lo hizo ella, pues creció en un entorno violento y a pesar de tener muchos sueños sus oportunidades para hacerlos realidad fueron pocas.
Ella considera importante aclarar que a pesar de que su vida ha sido difícil nunca le ha puesto mala cara a ninguna situación e inicia por contarnos que creció en una familia llena de carencias donde su madre, a quien define como su adoración, recibía maltratatos físicos y verbales por parte de su padre. Una de las razones que motivaron a Heidy a soñar con alternativas para tener una mejor alternativa para su futuro, y es ahí donde nace el sueño siempre de culminar sus estudios secundarios y empezar una carrera universitaria enfocada en los números.
‘‘Me gustan muchos los números, me gusta mucho la matemática, mi sueño es tener una carrera, un título, soñaba con hacer una carrera universitaria enfocada en los números, como administración o ser contadora, es lo que siempre he querido.’’
Sin embargo, este sueño se quedó atrás por un tiempo, pues su madre era la única que la apoyaba para estudiar, pero a pesar de todos sus esfuerzos las limitaciones económicas hicieron que sus sueños se aplazaron temporalmente.
‘‘Mi madre era la única que me apoyaba en todo, cuando podía hacia turnos, o trabajaba en lo que saliera y con lo poco que se ganaba me compraba mis cuadernos de estudio, ropa o zapatos. Por otro lado, mi papá jamás me dio nada, y nunca me apoyó con el sueño de ir a una universidad.’’
Dadas las limitaciones, Heidy tomó la decisión de trabajar desde muy temprana edad para comprar las cosas que sus padres no le podían dar.
‘‘Empecé a trabajar desde los 13 y hasta el día de hoy no he parado.’’
Pero trabajar y comprar lo que le hacia falta no disminuía el dolor que sentía Heidy de llegar a su casa y escuchar los maltratos que recibía su madre; este fue uno de los detonantes que la llevó a tomar una decisión que cambiaría su vida, conseguir pareja e irse a vivir con el lejos de su casa, pero hoy admite que fue una gran equivocación.
‘‘A los 15 años decidí irme de la casa, pensé que era la mejor opción, que me cambiaria la vida.’’
Finalmente se dio cuenta que fue una decisión apresurada, pues asegura que no disfrutó su juventud y tuvo que asumir responsabilidades de una persona adulta que nuevamente le hacían aplazar su sueño de estudiar.
Heidy es una madre joven, su primer hijo lo tuvo a los 16 años y el segundo a los 20 años; asegura que ser madre cambió drásticamente su vida pues ahora tenía más amor pero también más obligaciones pero ella siempre ha sido una guerrera y desde entonces se esfuerza más para sustentar su hogar y garantizar que sus hijos no pasen necesidades se volvió una prioridad.
Ella es una guerrera que se ha enfrentado a múltiples tipos de trabajo, pero hasta ahora todos informales. Ha trabajado en panaderías, vendiendo minutos, haciendo jugos, vendiendo lechona, haciendo turnos de mesera, como vendedora en almacenes y un sinfín de trabajos que le han ayudado a sacar sus hijos adelante.
‘’Desde pequeña me ha tocado a mi guerrearla y salir adelante como pueda, recuerdo que una vez trabajé en un almacén donde el día solo me lo pagaban a 20 mil, aunque es poco yo era feliz con tener un trabajo.’’
Pero después de pasar por todos estos trabajos se ha dado cuenta que es difícil trabajar sin tener un título, o una profesión.
‘‘Es muy duro puesto que en muchos trabajos nos explotan, y ponen a las personas a hacer más cosas que no les toca, por el mismo sueldo.’’
Para Heidy, sus hijos lo son todo, hoy son su razón de ser, y uno de sus mayores sueños es darles lo que ella no tuvo, sobre todo una oportunidad de estudiar; es por eso que nunca perdió la esperanza de continuar con sus estudios y tener un empleo formal y de calidad que le permita tener mejores ingresos.
Nos cuenta que volvió a creer en la oportunidad de cumplir su sueño cuando conoció el proyecto jóvenes en las TIC.
‘‘Cuando vi el anuncio del programa, me motivé y dije, esta es mi oportunidad y yo lo voy hacer por mí, por mis hijos, por mi mamá y sobre todo por salir adelante, porque las oportunidades si existen, solo hay que buscarlas.’’
Heidy no lo pensó dos veces para inscribirse en el proyecto y esforzarse por obtener un título técnico que le permita tener mejores oportunidades laborales para dejar de trabajar “en lo que salga”.
‘‘Quiero dejar de vivir alcanzada, que si hay para el arriendo, no hay para la comida.’’
Es así como emprendió este camino de formarse como Técnico laboral por competencias en Auxiliar Administrativo, y a pesar de las dificultades, hace lo posible e invierte parte de su tiempo en el desarrollo de las actividades académicas con la ilusión de hacer parte del proceso de intermediación laboral y finalmente obtener un trabajo justo donde se le reconozca por sus conocimientos y capacidades.
‘’La verdad yo quiero salir adelante, progresar y tener un buen empleo que me permita darle esa oportunidad a la niña que no pudo estudiar.’’
Redactado por: Daniela Mendez, Asistente de Comunicaciones, Proyecto Jóvenes en las TIC.